IBV estudia cómo evitar “reincorporaciones no efectivas” tras las bajas de larga duración de los trabajadores
La primera causa de baja laboral en España corresponde a los trastornos musculoesqueléticos. Además, según confirma un estudio del Instituto Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (INSST), los procesos de Incapacidad Temporal (IT) en aquellos episodios que representan recaídas presentan un tiempo de baja de una media de 71 días, lo que significa un promedio de 20,6 días superior al de las dolencias de nueva aparición.
Ante esta situación, y teniendo en cuenta el enorme problema, tanto de salud como económico, que esto supone para las personas trabajadoras y para las organizaciones, respectivamente, el Instituto de Biomecánica (IBV), centro de innovación referente en el campo de la Seguridad y Salud Laboral, está llevando a cabo un proyecto, enmarcado en el programa de becas de investigación de la Fundación PREVENT, para identificar los motivos clave de estas reincorporaciones que en la mayoría de las ocasiones no son efectivas.
Como punto de partida, se ha querido contar con la visión y experiencia de todos los agentes implicados en este proceso para conocer por qué no son efectivos los protocolos actuales y a partir de ahí crear nuevos protocolos y herramientas que se adapten a las necesidades actuales, mejorando así el resultado de la reincorporación.
Precisamente por este motivo se ha organizado una jornada en el Instituto de Biomecánica en la que servicios de prevención propios y profesionales de recursos humanos de diferentes empresas, servicios de prevención ajenos, mutuas colaboradoras con la seguridad social, sindicatos y diferentes instituciones han compartido su punto de vista desde su experiencia afrontando la reincorporación tras este tipo de bajas.
En concreto, la cita ha contado con la participación de Andrés Lluch Figueres, Director general de Trabajo, Cooperativismo y Seguridad Laboral de la Generalitat Valenciana y Director del Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo – INVASSAT y con Pilar Fuentes Llopico, Directora Territorial de Inspección de Trabajo y Seguridad Social de la Comunidad Valenciana; así como con representantes de la Inspección de Trabajo y el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS); de servicios de prevención mancomunados como SEAT S.A., de servicios de prevención propios como Grupo El Alto, Cinco Tenedores o empresas líderes en el sector de la distribución alimentaria; de servicios de prevención ajenos como Valora Prevención, UNIMAT o Grupo OTP; y MCSS como ASEPEYO, Unión de Mutuas o UMIVALE.
“El objetivo principal de este proyecto es identificar los problemas que encuentran las organizaciones y los diferentes agentes implicados en la reincorporación de personas trabajadoras tras procesos de IT de larga duración o recaídas por TME y por qué los protocolos actuales no son “existosos”, para a partir de esta información realizar propuestas que permitan redefinir dichos protocolos”, ha explicado la directora de innovación en Bienestar y Salud Laboral de IBV, Mercedes Sanchis. Concretamente, este grupo de discusión ha puesto sobre la mesa puntos clave como los requisitos que debería contemplar un procedimiento de vuelta al trabajo tras una baja de larga duración por trastornos músculoesqueléticos (TME), o la disponibilidad real de protocolos de reincorporación, tanto en estos casos como en aquellas personas que presenten bajas recurrentes por la misma lesión.
“Los protocolos actuales no se ajustan a la realidad de las organizaciones y de los diferentes agentes implicados. Precisamente por esto se está realizando una aplicación ineficiente o nula de los mismos”. De esta forma ha definido Sanchis la hipótesis de este estudio, que se marca una serie de pasos a seguir entre los que destaca el conocer si realmente las empresas tienen una estrategia para afrontar estas reincorporaciones, de qué forma están interactuando los diferentes agentes implicados, o si existen protocolos a nivel internacional que estén siendo exitosos y puedan ser aplicables en España.
Durante la jornada se ha tenido la ocasión de visitar las instalaciones de vanguardia de las que IBV dispone para el estudio de factores humanos, análisis de movimientos, capacidades funcionales de las personas y aspectos ergonómicos clave para el diseño de los puestos de trabajo del futuro, con un mayor ajuste entre las capacidades de las personas trabajadoras y las demandas de los puestos.
Finalmente, cabe destacar que el presente proyecto ha recibido financiación de la Fundación Prevent (beca).