“Hospital Líquido”: un nuevo concepto tecnológico para mejorar el seguimiento de pacientes en entornos extrahospitalarios
13 noviembre 2024.
Autor/es: José David Garrido Jaén, Giuseppe Caprara, Úrsula Martínez Iranzo, Cristina Herrera Ligero
Instituto de Biomecánica (IBV)
El sector de la salud está experimentando una profunda transformación debido a factores como el envejecimiento de la población y el avance de las nuevas tecnologías. Ello ha impulsado proyectos como el «Hospital Líquido», desarrollado por el Instituto de Biomecánica (IBV), que busca ofrecer una atención sanitaria centrada en el paciente mediante el uso de tecnologías no intrusivas para la monitorización y seguimiento remoto. Este enfoque permite personalizar los cuidados, optimizar la atención y mejorar la calidad de vida de los pacientes, reduciendo desplazamientos innecesarios y mejorando la disponibilidad de los servicios sociosanitarios. Además, el proyecto fomenta la adopción de la medicina de precisión, facilitando intervenciones preventivas a través del análisis de datos en tiempo real. No obstante, el despliegue del concepto Hospital Líquido enfrenta desafíos tecnológicos, normativos y operativos, destacando la importancia de la conectividad, la interoperabilidad de sistemas y la formación de profesionales sociosanitarios para garantizar su éxito. La colaboración público-privada y las iniciativas de compra pública de innovación juegan un papel clave para acelerar el desarrollo y la adopción de estas soluciones innovadoras.
INTRODUCCIÓN
Que la sociedad y todos los ámbitos en los que se vertebra sufren una continua evolución es una evidencia. No obstante, podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que los cambios se han acelerado considerablemente en los últimos años. Son múltiples las razones que pueden esgrimirse para explicar dichas transformaciones; sin embargo, el cambio demográfico y la irrupción de las nuevas tecnologías están jugando un papel determinante.
Uno de los ámbitos donde se hace más evidente esta transformación es el campo de la salud y los cuidados, los cuales se han convertido en una de las esferas sociales con mayor impulso en la innovación, la transformación digital y la investigación.
Los motivos que explican el dinamismo impulsado por el sector de la salud son diversos y de naturaleza variada (Figura 1). Uno de los más influyentes es el envejecimiento de la población y la creciente incidencia de las enfermedades crónicas. Patologías como la diabetes, la hipertensión, las enfermedades cardiovasculares o los problemas del aparato locomotor exigen un enfoque sanitario más flexible, continuo y accesible para todos los ciudadanos, con independencia de su lugar de residencia o de los recursos a los que tengan acceso.
Por otro lado, la democratización tecnológica también apuntala el cambio de paradigma. En los últimos años se ha generalizado el acceso a dispositivos móviles, el internet de alta velocidad y dispositivos de la vida cotidiana que pueden conectarse a la red y recoger datos de interés para el usuario. De alguna manera, la tecnología ofrece múltiples oportunidades para derribar las fronteras a la hora de acceder a servicios, recursos y contenidos que hasta hace poco solo eran accesibles de manera física.
Otro aspecto relevante a considerar, quizá consecuencia del anterior, es el aumento exponencial del conocimiento e información que los pacientes manejamos en relación con nuestra salud y calidad de vida. La cultura del autocuidado y el empoderamiento de las personas como actor principal en el devenir de nuestra vida nos permiten asumir un rol activo en el seguimiento de nuestra salud, lo que nos convierte en demandantes exigentes de mejores servicios, mejor atención y mayor cercanía en todo el proceso asistencial.
Por último, y no menos importante, aún permanece en la memoria colectiva el impacto de la pandemia de COVID-19, que evidenció la vulnerabilidad de los sistemas de salud más avanzados. Esto demuestra la necesidad de definir nuevos modelos deslocalizados y digitalizados que permitan mantener el funcionamiento del sistema incluso en escenarios tensionados o de limitación de recursos, tal y como ocurrió durante los periodos de confinamiento.
Con el propósito de dar respuesta a esta nueva realidad del sector sociosanitario, el IBV puso en marcha una línea de investigación hace más de cinco años, cuyo proyecto más destacado es “Hospital Líquido”. Este proyecto pretende impulsar el desarrollo de nuevas soluciones tecnológicas que permitan la monitorización y valoración de la salud de las personas, así como el despliegue de intervenciones personalizadas en los contextos cotidianos de los pacientes.
Figura 1: Seis tendencias estratégicas que marcarán el futuro del sector Sociosanitario y que justifican el proyecto Hospital Líquido
ALCANCE DEL PROYECTO
Entre las motivaciones principales del proyecto se encuentra la creación de un nuevo modelo sanitario de atención centrada en el paciente, lo que permitirá ofrecer cuidados mejor adaptados a sus necesidades y a su entorno personal, mejorando su calidad de vida y evitando desplazamientos innecesarios, los cuales en no pocas ocasiones, son corresponsables del elevado impacto medioambiental del sector hospitalario.
Por otro lado, “Hospital Líquido” nace con una clara vocación tecnológica: ampliar y enriquecer las capacidades de las tecnologías de telemedicina actuales mediante el desarrollo y despliegue de procedimientos no intrusivos y sin contacto, orientados a la medición de constantes vitales, señales fisiológicas, movimientos y patrones de comportamiento. La generación y análisis de estos datos en tiempo real permitirá una identificación temprana de riesgos y la determinación de indicadores pronósticos, facilitando de esta forma el desarrollo de intervenciones preventivas más precisas y efectivas por parte del personal sociosanitario.
Por último, conviene destacar que los objetivos anteriores contribuirán activamente al desarrollo de la llamada medicina de precisión, ya que, a través del uso de las nuevas herramientas digitales definidas en el proyecto, se posibilita adaptar las intervenciones a los hábitos y condiciones de cada paciente, optimizando la gestión de las enfermedades crónicas y la adherencia a los tratamientos.
En la siguiente figura se muestran de manera esquemática algunos ejemplos de las tecnologías y contribuciones alcanzadas hasta el momento en el proyecto:
Figura 2: Tecnologías desarrolladas por el IBV en el marco del proyecto, en el contexto de la telemedicina y la atención sociosanitaria remota.
RESULTADOS
El proyecto HLIQUIDO se ha centrado en torno a tres resultados, que se completarán en marzo del 2025:
La innovadora plataforma HLIQUIDO (figura 3), disponible en https://hliquido.ibv.org/: se ha desarrollado una plataforma digital con interfaces adaptadas tanto para clínicos como para usuarios finales, permitiendo una integración fluida y precisa de dispositivos de registro periférico. Gracias a esta plataforma, la gestión de datos de salud se convierte en un proceso accesible y seguro, adaptado a las necesidades de cada perfil de usuario, lo que supone un avance significativo en la atención extrahospitalaria.
Algoritmos avanzados de obtención de datos: una de las innovaciones clave del proyecto es un algoritmo de procesamiento de señal que permite, mediante cámaras convencionales, monitorear la frecuencia respiratoria de los pacientes de forma no invasiva. Además, se ha creado una base de datos con pacientes que presentan niveles bajos de saturación de oxígeno (SpO2) y variaciones en la presión arterial, ampliando los parámetros de seguimiento disponibles. Esta tecnología abre la puerta a un control completo y en tiempo real, fundamental para mejorar el seguimiento de la salud en condiciones crónicas y de alto riesgo.
Un modelo clínico de interpretación de parámetros: el proyecto también ha desarrollado un modelo único para la estimación del nivel de estrés, combinando variables fisiológicas captadas a través de la cámara con datos de cuestionarios validados. Esta integración innovadora permite una evaluación más completa y holística del bienestar emocional y físico del paciente, optimizando la personalización de los cuidados y anticipando posibles complicaciones.
Los resultados obtenidos en este proyecto permitirán a las empresas de la Comunidad Valenciana mejorar su competitividad en el mercado estatal e internacional, con gran impacto en la cadena de valor, y en específico para las empresas de los sectores SALUD/ASISTENCIAL y TECNOLÓGICO (medio-alta y alta tecnología).
Figura 3: Plataforma online de seguimiento clínico remoto
IMPACTO ESPERADO DEL PROYECTO
El IBV, como centro tecnológico y de investigación con amplia experiencia en el sector de la salud y los cuidados, busca transferir los resultados de sus actividades a los agentes clave del sector. En particular, el proyecto “Hospital Líquido” tiene como objetivo generar un impacto directo en los pacientes, las organizaciones sociosanitarias y las empresas (figura 4).
En primer lugar, los pacientes mejorarán su acceso a los servicios sociosanitarios sin la necesidad de trasladarse a centros especializados, lo que es especialmente beneficioso para personas con movilidad reducida, personas mayores o aquellas que viven en zonas rurales en riesgo de despoblación. Además, los avances del proyecto permitirán a los pacientes ganar autonomía en el control de su propia salud, mejorando la efectividad de los tratamientos y aumentando su satisfacción con los servicios de asistencia.
Por su parte, los servicios de salud se beneficiarán de la optimización de procesos operativos. La descentralización de la atención sociosanitaria reducirá la sobrecarga del sistema, permitiendo destinar más recursos a los pacientes en situación de mayor gravedad o con problemas de salud más comprometidos en el corto plazo. Esta optimización también conllevará una reducción en los costes de atención, ya que la monitorización remota y la valoración continua del estado del paciente, con acceso a información actualizada las 24 horas, los 7 días de la semana, garantizará que las intervenciones se realicen únicamente cuando sean realmente necesarias.
Por último, las empresas del sector, especialmente aquellas innovadoras, también se verán beneficiadas por los resultados del proyecto, en particular en la creación de nuevas oportunidades de negocio. La creación de soluciones integrales y conectadas de telemedicina permitirá escalar servicios con una demanda creciente como nunca antes se había visto. Además, la explotación de la información inédita recogida y el profundo conocimiento de las necesidades de los pacientes ofrecerán un terreno fértil para desarrollar nuevos servicios y soluciones personalizadas.
Figura 4: Principales agentes beneficiados del proyecto Hospital Líquido
Para ilustrar el impacto positivo en los diferentes agentes del sector, basta con analizar el desarrollo del concepto “Hospital Líquido” en el actual marco de colaboración público-privada, en gran medida, a través de las compras públicas innovadoras. En estos procesos los proveedores tecnológicos y los servicios de salud se unen para generar sinergias dirigidas al desarrollo de soluciones integradas, así como en la definición de estrategias de adopción masiva de las mismas. Precisamente, el IBV, como agente movilizador de la innovación entre el sector empresarial, viene colaborando muy activamente con el sector industrial en proyectos de compra pública de innovación centrados en esta misma idea; ejemplo de ello son los proyectos europeos de Pre-Comercial Purchase (PCP) ROSIA https://rosia-pcp.eu/, TIQUE https://www.tiquepcp.eu/ o Procure4Health https://procure4health.eu/, donde están siendo validadas soluciones innovadoras en entornos reales de atención remota, acelerando el ciclo de desarrollo y logrando una aceleración del grado madurativo de las innovaciones.
CONCLUSIONES
Como ha sido señalado en párrafos anteriores, el desarrollo e implementación del concepto “Hospital Líquido” se sustenta en gran medida en el aprovechamiento de la revolución tecnológica en la que nos encontramos. Las plataformas de telemedicina avanzada están permitiendo, cada vez más, incorporar sistemas expertos de diagnóstico temprano, funcionalidades de seguimiento y evaluación a distancia, integración de modelos de inteligencia artificial (IA) capaces de procesar grandes volúmenes de datos para identificar patrones y predecir potenciales complicaciones, así como recursos personalizados para la prevención y el manejo de las enfermedades crónicas. Además, los dispositivos portables, con conectividad a internet, cada vez incorporan mayor capacidad de generar información inédita y de compartirla de forma continua y automática con el equipo médico. Esta información, unida a los últimos avances de analítica avanzada, posibilitará la gestión eficiente de la información de salud a nivel poblacional, facilitando la personalización de los cuidados y la mejora en la toma de decisiones.
A pesar de todas estas bondades, el despliegue y consolidación del “Hospital Líquido” en el seno de las organizaciones de salud y de cuidados todavía requiere respuestas a determinados aspectos y retos tecnológicos, normativos y operativos, los cuales podrían frenar su uso generalizado (figura 5). En particular, resulta imprescindible garantizar una cobertura sociosanitaria remota eficaz, a través de redes de comunicación seguras, estables y de alta velocidad en todos los territorios. Además, la interoperabilidad de los sistemas es esencial, lo que lleva implícito la conectividad y digitalización de los sistemas de salud, facilitando el intercambio de datos entre las organizaciones sociosanitarias y los dispositivos remotos con arreglo a lo establecido en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) y satisfaciendo los máximos estándares de ciberseguridad.
Más allá de los aspectos técnicos mencionados, resulta esencial contemplar aspectos relacionados con los llamados Factores Humanos, como la usabilidad, adaptabilidad, sencillez y ergonomía física y cognitiva, los cuales resultan esenciales para garantizar el uso y adherencia de estos sistemas por parte de los pacientes. De este mismo modo, resulta igualmente imprescindible el concurso de los profesionales sociosanitarios, los cuales deberán estar convenientemente capacitados, adaptando las tecnologías a sus necesidades y a los nuevos procesos organizacionales derivados de su implantación.
Figura 5: Principales retos a abordar en el contexto del Hospital Líquido
AGRADECIMIENTOS
En “Hospital Líquido” colaboran empresas del sector salud y tecnológico que abarcan desde la asistencia a domicilio y remota, la sensorización, las tecnologías de monitorización y el desarrollo de software, como Atès a casa, Domotik, Mysphera, Tic4care y Tyris Software.
Este proyecto cuenta con el apoyo de la Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo de la Generalitat Valenciana, a través del IVACE+i, y está financiado por la Unión Europea, a través del Programa FEDER Comunitat Valenciana 2021-2027. (IMDEEA/2024/13).
AFILIACIÓN DE LOS AUTORES
Instituto de Biomecánica de Valencia
Universitat Politècnica de València
Edificio 9C. Camino de Vera s/n
(46022) Valencia. Spain
